jueves, 6 de mayo de 2021

Abue

La memoria viva, caldito de papas temprano en la mañana, cocina de leña, olor de antes.

miércoles, 4 de enero de 2017

San Telmo Tango y Vino

Bitacora: Buenos Aires, Argentina
Febrero de 2014

"Las tardecitas de Buenos Aires tienen ese que se yo, viste?
salís a caminar por arenales, lo de siempre: en la calle y en vos
cuando de repente detrás de un árbol aparezco yo,
mezcla rara de penúltimo linyera y de primer polizonte en el viaje a venus
te reís, pero solo voz me ves"

Intro Canción: Balada para un loco de Roberto Goyeneche

Me consideraba un amante del vino y el tango sin saber lo que era el vino ni el tango, hasta que anduve vagando por las calles de este bello rincon de Buenos Aires.


El barrio mas lindo y viejo de BsAs tiene un aroma a antaño y bohemia, casas viejas llenas de historias, murales, balcones, música en cada esquina y en las tardes afuera de algunos bares te puedes encontrar una pareja bailando tango, con la elegancia y sensualidad que lo caracteriza. Pase algunas noches en este paraje, caminando las calles parando en algun pequeño bar viejo y clásico, con un vino merlot en la mesa, un poco de humo en la cabeza y mis oídos embelesados por el sonido del bandoneon, la guitarra, la voz arenosa y polvorienta del cantante de turno; Todo un flashback a mis 6 años en casa de mi abuelo en Tunja, Colombia, donde en compañía de una guitarra y un wisky se regocijaban cantando alguna milonga de Carlos Gardel.

Viajeros y gente en el camino

Están los que te miran y los que no, están los que te saludan y los que no, están los que te abrazan y también los que nunca se olvidan, como los que te enseñan algo o los que no dejan huella, de seres hermosos esta lleno el camino cuando viajas.

Muchas veces en mi casa, en mi tierra la gente que me quiere y quiero, temen, ellos temen porque algún día me falte algo, temen por lo que me pase mientras viajo, temen porque me vaya a cruzar gente mala que me haga daño, temen porque creen que el mundo es como lo ven en noticias y como todo ser vivo, temen a lo desconocido, y en definitiva es ese instinto de supervivencia y de manada que llevamos dentro, cuidarme y cuidar a mi parche

la gente que te cruzas viajando esta siempre cargada de buena onda que recibe de toda la novedad del mundo que están conociendo y eso es lo que comparten, esa linda energía pues a la larga el viajar es una escuela tan fuerte que te cambia, te hace madurar, te hace mejor persona, he conocido gente que un viaje les ha cambiado la vida, me incluyo, moverse es una sensación que se vuelve adictiva

Gaston, Alex, Os David, Kevin, Charly, Michelle, Betsy, Jose, Marcos, Yusuf, Diego, Naty, Brian, Pili, Meli, Sofi, Sabri, Nacho, Sebas, Pablo, Morgan, Mia, Felipe, Francesco.. 

cientos de nombres, cientos de nacionalidades, muchos hermanos que me ha dado la vida, que como las estrellas, aunque no se vean todos los días, su luz siempre esta allí. 

Entre volcanes


Bitacora: Antigua, Guatemala. mayo 2016

Cuando abrimos las alas el viento nos lleva a lugares que no te esperas llegar, puede ser efectos del azar, puede que haya un plan de aquel impredecible elemento, nunca lo sabré, no me interesa, solo se que viajo con el viento simplemente abro mis alas y no vuelo, pero caigo con estilo. 


Guatemala, país de volcanes cultura maya, gente bella y amable, con manos color de tierra, huipiles de colores, ojos oscuros como la noche y sonrisas que te llenan de luz.

Uno de mis propósitos era subir hasta el Acatenango, un volcán situado cerca a la ciudad de Antigua desde donde se pueden avistar 4 volcanes mas, entre ellos el volcán de Fuego, este ultimo en constante actividad, durante el recorrido se puede sentir el cambio de alturas, en la vegetación, el clima y la falta de oxigeno, después de mas de 8 horas caminando llegamos a casi la cima del acatenango, desde donde durante toda la noche observamos una explosión tras otra del volcán de fuego, con cada estallido la tierra temblaba, saltaba lava y piedras volcánicas por los cielos, y yo estaba allí atónito y en silencio ante tal espectáculo de la naturaleza, a 3900 msnm a 3° centrados, en frente una vista increíble, sobre las nubes, al fondo el horizonte del océano pacifico, las lucesitas de la ciudad, una sensación inefable que te quita el aliento y te das cuenta que estas mas que vivo y la tierra también.



miércoles, 6 de noviembre de 2013

pastoruri: un Blanco sobre blanco


Bitacora: Huaraz, Peru. Oct/2013

Desde siempre le he temido a las alturas, y no me refiero a sumarme al balcón de un dieciseisavo piso, ni a la montaña rusa, por el contrario esa sensación me supera; me refiero a las alturas sobre el nivel del mar, al frío que trae, la falta de oxígeno  en los pulmones y el corazón tocando lo mejor de su repertorio para no desfallecer, aunque es una paradoja pues nací en una ciudad de la cordillera de los Andes fría y alta, congelada en el tiempo y casi en el espacio, aunque allí no crecí, crecí al lado de un río místico, el rio magdalena, una descomunal serpiente líquida que sueña con ser mar, tal vez de allí provenga mi amor por la playa, el mar la frontera entre dos mundos. Dando un leve giro al tema que comencé subiré de el nivel del mar hasta los cinco mil cuatrocientos metros de altura en el que habita el glacial que ayer conocí, y es que como trasegar por un país como Perú sin adentrarse por estas rutas salvajes?.

Mientras el altímetro subía, el oxigeno escaseaba, el cielo se nublaba y los grados bajaban, fui observando como se hacía más grande el majestuoso témpano que nos llamaba a acariciarlo. Llegamos hasta un punto en vehículo, y luego la naturaleza nos revelo su verdadero rostro, la incesante   sensación de frío y muerte, que tapa los oídos, eriza la piel y acelera el corazón mezclada con la indescriptible belleza de la nieve cayendo sobre el rostro hermosa y salvajemente; mis pies como un pa de témpanos, intentaban descifrar el camino menos doloroso hacia las alturas, y a cada paso en contra de la gravedad, la tierra te hala, no te deja avanzar tranquilo y cada vez cuesta más, la pacha te ancla los pies a ella como diciéndote que no la olvides, recordándote que de ella provienes y que camines sus senderos con humildad.

Luego de un corto pero agotador trayecto el blanco se asomaba incandescente quemando mis pupilas hipnotizadas por su esplendor,  Que me despertaban una sensación de austeridad absoluta. De este lado de camino donde la nieve y yo estábamos de pie, mis sentidos no daban crédito a la belleza infinita de esa gran roca de hielo, me fui acercando con respeto y admiración mientras las lágrimas se asomaban cálidamente, puse mi mano sobre la montaña congelada, enseguida una sensación de plenitud y alegría se apoderó de mi y mis pupilas veladas por tal belleza, mi cuerpo rodeado del blanco de la nieve, sobre el piso blanco de la montaña, bajo el cielo blanco por las nubes y glacial blanco y majestuoso y mi rostro blanco que palidecía de la emoción. El blanco sobre blanco, una reflexión mística.

amor amarillo


Fue un espasmo de alegría y plenitud, días de sol, noches lunáticas de baile y descontrol, la misteriosa Villa hace otra vez de las suyas en mi vida, me ofrenda y me arrebata arbitrariamente personas y momentos, de la manera más arrogante y bella, dando otro giro al baile al que hace años me invito, y me llena de luz en medio de la oscuridad de mis miedos, como una tenue luciérnaga que deambula cansada en la fría oscuridad.

Bichito de luz, la plaza mayor y los vientos del sur se pusieron de acuerdo en este encuentro, el atardecer fue testigo del cruce entre un tinto negro y una cerveza helada, se cruzaron las miradas se mezclaron los caminos "y hubo tanto ruido que al final llego el final" en medio de la salsa y las risas el instinto libero un magnetismo salvaje "noches de arreboles que incitan y cual flama encienden corazones, aún revolotean los vapores emanados por sus humanas pasiones.

Una flor amarilla, un reloj amarillo, una casa amarilla, un cabello amarillo y un sol que juntó con su sonrisa deslumbraba a su paso mis noches de insomnio, fueron testigos de un nuevo comienzo, y un final sin final cargado de rutas por recorrer y mundos por descubrir. Amar el mundo, vivir el presente aquí y ahora, el instante perpetuo, asistir al llamado del universo y escucharlo atentamente, es el viento que susurra su voz.

..Cristales de amor amarillo.

lunes, 19 de noviembre de 2012

monotonía de lo impredecible

es un hecho recurrente.. nada ocurre frecuentemente, no es predecible, no aburre, no entretiene, solo pasa, es un apacible caos de reacciones químicas que fluyen y fluyen rizomaticamente y tejen una breve y fantástica historia.. la vida!

domingo, 16 de septiembre de 2012

disyuntivas

una vez mas en frente de las disyuntivas del camino, indecicion, lugar a dudas, escuchar el latir de corazon, caminar por los laberintos de la imaginacion, mediar con mi desalmada razon, le cedo la palabra a la intuicion.. le dejare esa tarea al azar, mi mejor aliada. dejar que el rio siga su cause...

lunes, 20 de agosto de 2012

Decálogo de autoayuda para expocisiones de arte

1. No preste demasiada atención a lo que dice el artista sobre su propia obra. Los artistas no saben bien por qué hacen lo que hacen, ocultan el rastro incierto que los llevó a un hecho estético bajo el trazo legible de una finalidad política o social, la grieta que abren con el arte la taponan con la lápida de un título pomposo. Las declaraciones de muchos artistas son producto de la culpa que sienten por el ocio creativo que detentan.

2. Anteponga el arte al artista. Usted puede estar a solas con la obra de arte, sea insaciable y egoísta —mas no celoso o autista—.

3. ¡Deténgase! No permita que el prestigio de un galardón o un caso de censura sea lo único que invita a mirar con atención una obra de arte. Las alabanzas o las canalladas son como las tetas: una esta mal, dos son perfectas pero tres, aunque le añadan volumen al argumento, son monstruosas.

4. Si usted descubre la fórmula que compone una obra de arte tenga cuidado con atribuirle una preparación demasiado precisa: la facilidad de los resultados es engañosa.

5. Las obras de arte solo exageran algo que usted ya sabe. En algunos casos el desprecio radical que usted siente por una obra no es más que una forma velada de autocrítica.

6. Póngale comillas al “crítico”. Desconfíe de todo discurso que con miras a ganar contundencia, no matiza: el enfrentamiento con una obra de arte exige un escudo de armas cargado de interrogantes; cambie el es del crítico por el tal vez del lenguaje. Solo el arte es más verdadero que la política o la religión pues abraza la incertidumbre y miente con la verdad. Déjese amacizar, déjese engañar.

7. La cultura ha parido los únicos tres enemigos que tiene una obra de arte: el artista, el crítico y el espectador, intente por un breve momento no ser como ellos. Cuando la cultura va, el arte ya ha ido y ha vuelto, si la cultura es el registro civil de la estética, las obras de arte son hijos ilegítimos que no hay que registrar en notaría.

8. Ante las explicaciones, dude. No trate de conocer las obras de arte, trate de comprenderlas; devuelva a sus ojos la ignorancia, vaya paso a paso en su lectura, evítese los resúmenes. Describa e interprete; no interprete primero y luego describa.

9. Llegue a las obras de arte cuando están distraídas, ¡sorpréndalas!

10. Sea profundamente superficial, mire al frente, mire abajo y mire arriba.Los espectadores superficiales son los únicos que no juzgan por las apariencias. Si solo quiere ideas acuda a una iglesia de cienciología, si solo quiere formas vaya a un almacén de pantuflas, pero si es incapaz de separar la forma de las ideas, ensaye una dulcería o disfrute de la exposición de arte. Las exposiciones de arte son una pasión quieta, una nadería comparada con la orgía titilante e interactiva de las experiencias mediáticas actuales. Aprenda algo de la quietud del arte, esa indiferencia esconde un regalo: usted dejará de existir por un instante.